martes, 6 de agosto de 2013

Lobezno inmortal

Ayer fui al cine de nuevo, sorprendente, no por el hecho de ir en sí, sino por que me pude decidir por uno de los riñones que dejaría en la taquilla...

Esta vez le tocó a la segunda entrega de Lobezno, el spin off de la saga “X men”, y la sexta encarnación de Hugh Jackman en el personaje.

Para ser sincero, no tenía demasiadas esperanzas puestas en esta secuela, por que de la primera apenas me acuerdo, solo recuerdo que no me gustó demasiado.

Esta vez han querido recavar más en la psique del personaje, eso que está tan de moda y que le dio tan buenos resultados a Christopher Nolan con su Batman, y tantos bostezos a Zack Snyder con su hombre de acero. A James Mangold le ha quedado a medias. A la vez que nos acerca un Logan más humano, por su pasado atormentado, al que se suma la muerte de su mutante novia Jean con sus propias manos, llega a aburrirnos tanta autocompasión por su desdichada inmortalidad.
La trama se desarrolla en tierras niponas, donde su pasado le ha llevado de vuelta para despedirse de un antiguo conocido al que salvó la vida, y hoy ya anciano a punto de morir, quiere agradecerle aquel acto con un gesto muy “humano”.

El que esta vez sus enemigos tan estereotipados japoneses sean ninjas y yakuzas de la tierra donde nace el sol, es de agradecer, por que así se le da más protagonismo a las luchas cuerpo a cuerpo, sin tanta infografía. Que sí, con mucho cable, pero con menos efectos especiales que cuando sus contrincantes son mutantes con supérpoderes, echando mano más al efecto digital que a la interpretación.
En esto último hay que decir que también Jackman destaca más que en la anteriores. Debido a que vuelve a él su naturaleza humana, sufriendo sin recuperarse de sus heridas al instante, por lo cual, aparte de su atormentada personalidad, nos refleja también su dolor físico. El resto de actores también se encuentran a la altura de una producción de estas características, ninguno está para oscar, pero no llegan a decepcionar. Tal vez sea la rusa Svetlana Khodchenkova la más desaprovechada, interpretando una mutante bicha mala muy de cliché, que no llegará a ser memorable, y es que no han sabido explotar la sensualidad que luce en el cómic su personaje. Para colmo la han maquillado pareciéndonos feísima, con lo mona que es en realidad esta chavala.
Una película que entretiene, pero que sus 126 minutos de metraje se nos hacen un poco largos en algunos pasajes, donde volvemos a reiterar lo desgraciado que es nuestro héroe, y repitiéndonos la acción. Por que en Hollywood aun piensan que somos tan tontos que nos tienen que dejar las cosas, hasta en las cintas palomiteras, bien claritas.


2 comentarios:

  1. Me sobra completamente todas las apariciones "fantasmagóricas" de Famke Janssen... esas partes me sobraban... aunque eran para recalcar lo atormentado que está Logan...

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  2. Totalmente de acuerdo. Y hay que comprobar ese cameo del Gamga Style en la peli...

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