Hacía
mucho que oía hablar de Murakami, en particular de su novela
“1Q84”, inspirada en el universo orwelliano de “1984”.
Así, que no sé si por esto o por algo que leí
por ahí, estaba convencido de que la obra de este autor se
centraba en el género de la ciencia ficción. Como es
uno de mis género favoritos, traté de encontrar algún
título, e indagar, por fin, en su obra.
Conseguí
un ejemplar de “Tokio Blues”, y me dispuse a devorarlo de una
sentada. Cual fue mi sorpresa al no ver por ningún lado un
ápice de ciencia ficción, o similar. Leía página
tras página, sin que se vislumbrara nada fuera de la
realidad, y como quedaban pocas páginas, pensé que como
no viniese un ovni en la última y adujese a los personajes, no
habría ciencia ficción ni por el forro.
Así
fue, un telediario tiene más ciencia ficción que este
libro, y es que el error fue mío. Este no es un autor del
género, sino como cuenta la wiki, es un autor surrealista,
posmodernista, géneros que tampoco encuentro en “Tokio
blues” (¿?).
Lo
que si descubrí en su lectura fue un autor intimista,
nostálgico, onírico, triste y optimista al mismo
tiempo. Y lo que me llamó la atención es que un autor
asiático, tenga una forma de escribir tan occidental. Leyendo
su biografía se entiende este rasgo.
El
título original es “Norwegian Wood”, como
la canción de The Beatles, canción a la que se hace
alusión en el libro, al ser la favorita de uno de los
personajes. Y es que se nota que el autor es un fan del grupo en
particular, y de la música en general, por la cantidad de
títulos y canciones que aparecen en su obra.
En
la novela, un ya maduro Watanabe nos narra, en forma de flasback,
su
primer año de universidad, los recuerdos de su paso de la
juventud a la madurez por medio de unos acontecimientos que podríamos
denominar como extremos, donde convergen la muerte, el sexo, la
amistad, y demás aspectos que van esculpiendo nuestra
personalidad y nuestra manera de ser en la edad adulta. Todo ello
narrado de un modo exquisito, transmitiéndonos la nostalgia y
la parsimonia con la que el protagonista acontece los pasajes de su
vida.
No
quiero aportar ni una pequeña sinopsis, por que es imposible
hacerlo sin desvelar algún dato de la historia, la cual se
disfruta más si no sabemos nada.
En
2010 se estrenó la película basada en esta obra,
dirigida por Trần
Anh Hùng, siendo lo más destacable su banda sonora,
firmada por Jonny
Greenwood, que para quien no lo sepa, es el cantante del grupo
“Radiohead”. Ya la tengo en mi poder, así que en cuanto la
vea, os contaré si merece la pena dedicarle tiempo. Lo que si
os puedo decir es que al libro sí merece emplearle su tiempo,
que no será mucho por la facilidad con la que se lee, y aunque
la historia parezca lenta o aburrida, Murakami me ha conquistado por
su forma de narrar, haciendo que se aprecie cada detalle.
No hay comentarios:
Publicar un comentario